DEFINICION:

Una corona dental protésica o “funda”, como se la conoce popularmente, es una “restauración total rígida” que se realiza sobre una pieza dental o sobre un implante dental.  Se encuentra dentro de la clasificación de “prótesis fija” en la odontología.

MOTIVOS DE USO:

Una corona protésica se realiza por diferentes motivos:

  • Para devolver la función y estética de la corona (no confundir que las dos se llaman “coronas”) natural de un diente destruida por caries, traumatismos o bruxismo.
  • Para devolver la función y estética de la corona de un diente que no tiene la anatomía, estructura o coloración correcta.

TIPOS DE CORONA:

  • Metálicas:  Son totalmente de una aleación (diferentes metales combinados) metálica.  Son excelentes en resistencia, ajuste con el diente y durabilidad, pero son feas estéticamente  salvo que te gusten los dientes de color plateado o dorado.  Las mejores dentro de las coronas metálicas son las de aleaciones nobles, por ejemplo de oro, pero son muy costosas.
  • Acrílicas:  Hay de diferentes calidades, las mejores son las que realiza el Técnico dental a través de una impresión (molde) de la boca del paciente y las peores son las que confecciona directamente en la boca del paciente el Odontólogo.  Habitualmente este tipo de coronas se utilizan como coronas “provisorias”.  Te recomendamos que leas ¿Qué es una corona provisoria?.  No son buenas en durabilidad y resistencia y el ajuste con el diente se va perdiendo con el tiempo, favoreciendo la recidiva de caries. Son muy buenas estéticamente y son económicas.
  • Resinas modificadas:  Son muy similares a las de acrílico confeccionadas por el técnico dental, pero con mejores propiedades.  Son más costosas.
  • Metálicas con frente estético:  Son iguales que las metálicas pero tienen una capa estética en la zona de la corona que se ve.  Este frente es de acrílico o de porcelana.  Aunque tengan este frente estético no son muy buenas estéticamente.  Estos frentes estéticos se suelen saltar.  Son más económicas que una corona de porcelana.
  • Porcelana sobre metal:  Son las más conocidas y tradicionales.  De ellas son las que habla el odontólogo cuando se refiere a “coronas de porcelana”.  Son iguales que las metálicas, pero son muy estéticas, ya que están recubiertas totalmente por porcelana. El núcleo (casquete) de metal le confiere resistencia a la porcelana que va a otorgar la estética y anatomía dental. La única desventaja es que se ve una “línea gris” (debido al borde de la unión del metal y la porcelana) en donde se junta la corona con la encía.  Esta línea gris, se evidencia mejor al pasar los años de instalada la corona sobre el diente, debido a la retracción (perdida) de la encía que la cubría.
  • Porcelana sobre alúmina:  No tiene un núcleo de metal, este es de un material llamado alúmina.  Este núcleo de alúmina cumple la función del núcleo metálico de las coronas de porcelana sobre metal, pero es de un color estético similar al diente.  Al no haber metal no tiene la “línea gris”.  Son más estéticas que las coronas de porcelana sobre metal, pero no son tan buenas en el ajuste con el diente.  Sobre este casquete o núcleo de alúmina, se da la anatomía y estética imitando al diente con una porcelana similar a las coronas de porcelanas sobre metal.
  • Porcelana sobre circonio:  Tiene todas las ventajas de las coronas de porcelana sobre alúmina  pero tienen un ajuste similar al metal.  Son más resistentes que las alúmina y se pueden confeccionar puentes con circonio. Son las más modernas y son fabricadas por una máquina automatizada juntamente con una computadora. Sobre este casquete o núcleo de circonio, se da la anatomía y estética imitando al diente con una porcelana similar a las coronas de porcelanas sobre metal o sobre alúmina. En este último tiempo se están haciendo totalmente de circonio, sin la cobertura de porcelana tradicional, pero no son tan buenas estéticamente, debido a su baja translucidez.
  • Disilicato de Litio:  Son totalmente de este tipo de porcelana. Son excelentes estéticamente, hasta puede ser que sean las mejores en este aspecto.  Esta ventaja estética se debe a su alta translucidez,  dando una similitud al esmalte dental muy alta.  Esta alta translucidez, juega en contra si la pieza dental tiene un “perno muñón” metálico, ya que se transparenta el color del metal a través de la corona.  Por este motivo y su menos resistencia a las fuerza masticatorias, su uso es más limitado.