Si sientes algunos de éstos síntomas que describimos, puedes necesitar nuestra ayuda.

Los síntomas de la ansiedad son múltiples, y varían de un individuo a otro, entre ellos están: palpitaciones, taquicardias, sudoración, inestabilidad, sensación de ahogo, miedo a volverse loco o a perder la razón, temblores, hormigueos, adormecimiento de diversas partes del cuerpo, hiperventilación (respirar más oxígeno del que necesitamos) que produce la sensación de falta de aire, dolor de cabeza, mareos, insomnio, excesiva preocupación, sequedad de la boca, etc.

Estos síntomas son los más comunes y frecuentes en la ansiedad, sobre todo en el trastorno de la ansiedad generalizada.

Todas las personas, en algún momento de su vida sufren ansiedad, es una reacción normal ante un peligro, etc.., pero aquí hablamos de la ansiedad patológica, que el sujeto puede arrastrar el resto de su vida.

Al tratar la ansiedad detectamos y modificamos aquellos pensamientos que provocan respuestas afectivas perjudiciales para la persona así como formas y métodos para resolver el problema que provoca los síntomas del trastorno.